El lunes entrené con Joel Codina, un compañero de entrenos debutante este año en el club. El entreno fue de 8 km a ritmo progresivo. La primera mitad del recorrido la completamos a un ritmo suave y no fue hasta la vuelta que incrementamos el ritmo notablemente. Los dos kilómetros consiguientes nos pusimos a ritmos de 4'15'' con viento en contra, así que ya puedo considerarlo un ritmo importante. Sin embargo, aún no iba a tope. Eso, como siempre, me lo reservé para los 2 km finales. Ahí adopté un ritmo de unos 3'50'' por km, y dejé a Joel atrás. Llegué más hecho polvo de lo que esperaba, debido seguramente a la competición del sábado (aún me notaba cargado). Sólo nos quedó estirar un poco y desearnos una feliz Navidad.
El martes tocó descanso y comidas familiares. Y lo último se notó en el entreno de ayer. Hice unos 9 km (no llegó) de rodaje suave por la montaña, a unos 1.300 metros de altitud y a 6ºC. Esto sumado a la cantidad impensable de ingesta de comida del día anterior me dejó muerto al acabar la carrera. El ritmo fue suave, a unos 4'55'', pero a verdad es que no me acabé de encontrar cómodo corriendo, sobretodo en tema de respiración. En fin, después de unos estiramientos ducha y a descansar. Hoy también día de descanso, donde como mucho haré algo de piscina por la tarde y mañana unas series.
Ayer, en la Cerdaña, preparado para correr
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